El lunes 19 de mayo, Israel anunció la entrada de cinco camiones de ayuda humanitaria de la ONU a Gaza, una cantidad que, según las ONG, es insuficiente para detener la "catástrofe" en curso. El presidente francés, Emmanuel Macron, y los primeros ministros de Reino Unido, Keir Starmer, y Canadá, Mark Carney, advirtieron de que "no se quedarán de brazos cruzados" ante las "acciones indignantes" del Gobierno de Benjamin Netanyahu.